Grandeza cultural de Tabasco.


POR RENÉ ALBERTO LÓPEZ
No es un tema menor, por el contrario, es un orgullo resaltar nuestras raíces en un evento exitoso como el Festival Cultural Ceiba 2025, realizado durante tres días en la capital tabasqueña.
De viernes a domingo más de 18 mil tabasqueños abarrotaron los siete foros en los que admiraron 18 actividades con la presentación de 467 artistas, además de poetas y escritores, lo mismo a paisanos apasionados por nuestras raíces ancestrales, lo que convirtió a Villahermosa, en esos días, en la capital de la cultura del sureste.
El programa de esta edición, novedoso como nunca, tuvo de invitado al país Costa de Marfil, tanto es así que rompió toda expectativa de los organizadores, es por ello el rostro cargado de satisfacción que mostró la secretaria de Cultura Aída Castillo, durante la clausura la noche del pasado domingo.
No es ninguna exageración destacar el tema cultural. En esta administración Tabasco está viviendo momentos extraordinarios, pues este festival ofreció una programación variada, entre esta la presentación del Teatro Campesino e Indígena con su histórica trayectoria en esta entidad, también la admirada, por propios y extraños, Tarde de Danzón, que reunió a tabasqueños de viejo cuño y a nuevas generaciones bailando esa música de época.
Por cierto, en esta edición, por primera vez, el Salón “José Gorostiza” del Palacio de Gobierno, formó parte de los escenarios del festival, pues en su amplio salón no pocos autores presentaron su libro, entre las obras figuró Antología de Pimienta Gorda de la cardenense (mi paisana) Vianey Pérez López.
Otros espacios igual abarrotados durante los eventos fueron Plaza de Armas, el Malecón Carlos A. Madrazo, la Casa de la Trova, el Teatro Esperanza Iris y la zona CICOM, donde expusieron su talento cada uno de los artistas.
No puede dejar de resaltarse los bailes populares y las danzas contemporáneas, el primero de ellos sacó a flote la algarabía de este pueblo choco amante del jolgorio, además de presentaciones de DJ’s y clases magistrales.
En cada uno de los foros se concentraron cientos de tabasqueños adictos al arte y la cultura, aunque dos eventos culminantes, con sabor especial, se vivieron cuando entregaron el galardón “Savia del Edén”, a Doña Esperancita Pérez Tosca, por su impulso y rescate de las tiras bordadas a punto de lomillo, lo mismo a Roger Suárez Vela, guardián de la Danza del Pochó de Tenosique, por su invaluable aportación a la preservación de las tradiciones. Ahí se las dejo.