Acuerdo histórico en el Bajío: gobierno y productores logran pacto para estabilizar el precio del maíz y fortalecer la soberanía alimentaria

Tras intensas jornadas de diálogo que se extendieron hasta la madrugada de este miércoles 29 de octubre, el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdegué Sacristán, anunció la firma de un acuerdo histórico con líderes de productores de Jalisco, Guanajuato y Michoacán, con el propósito de estabilizar el precio del maíz y ofrecer certidumbre al campo mexicano.
El funcionario destacó que el entendimiento fue resultado de una coordinación estrecha con las y los gobernadores de las entidades involucradas, quienes participaron activamente en la búsqueda de soluciones frente a la crisis de comercialización que afecta al grano.
“El diálogo y la corresponsabilidad entre el gobierno y los productores demostraron que el campo mexicano puede salir adelante con acuerdos, no con imposiciones”, señaló Berdegué tras la reunión que concluyó a las 2:00 de la madrugada.
Excedente mundial, el origen del problema
El titular de la SADER explicó que el conflicto surgió a raíz de un incremento global en la disponibilidad de maíz, lo que provocó una caída en los precios y puso en riesgo la rentabilidad de miles de familias campesinas en el Bajío. Frente a ello, el gobierno federal, junto con los gobiernos estatales, optó por un esquema de apoyo directo y ordenamiento del mercado.
Principales acuerdos
El documento firmado por la mayoría de los representantes establece tres ejes de acción que marcarán el rumbo de la política agroalimentaria en la región:
1. Apoyo al precio del maíz
- El gobierno federal y los estados garantizarán un pago de 950 pesos por tonelada a los productores.
- El beneficio alcanzará a 90 mil productores de la región.
- Se apoyará la comercialización de 1 millón 410 mil toneladas, con un tope de 200 toneladas por productor, para asegurar equidad en la distribución del recurso.
2. Acceso a crédito y seguros agropecuarios
El programa “Crédito Cosechando Soberanía” ampliará su cobertura para incluir a pequeños y medianos productores que antes no contaban con respaldo financiero.
- Ofrecerá tasas preferenciales del 8.5% anual.
- Todos los beneficiarios contarán con un seguro agropecuario integral, que cubrirá daños por sequías, inundaciones o plagas, evitando el endeudamiento ante pérdidas imprevistas.
3. Ordenamiento del mercado y comercialización
En cumplimiento de una instrucción directa de la presidenta Claudia Sheinbaum, la SADER iniciará la creación del Sistema de Ordenamiento de Mercado y Comercialización del Maíz, un mecanismo que establecerá precios de referencia transparentes y fomentará acuerdos directos entre productores e industriales.
“Este nuevo sistema eliminará la incertidumbre que cada año enfrentan los agricultores. No se trata de subsidios momentáneos, sino de construir un mercado justo y soberano”, subrayó Berdegué.
Hacia una política agrícola con visión de largo plazo
Con este pacto, el gobierno federal busca dar un giro estructural al modelo agrícola, priorizando la seguridad alimentaria y el bienestar rural. El acuerdo será revisado trimestralmente para evaluar resultados y ajustar estrategias.
La SADER prevé que el esquema pueda replicarse en otras regiones del país, especialmente en zonas productoras de granos básicos, como parte del compromiso de la administración federal con un campo fuerte, sostenible y con justicia social.
